jueves, 1 de octubre de 2009

Tú, solo tú...


Tú, solo tú...nadie más que tú.
En mi soledad fría, silenciosa, inherte, habita tu recuerdo, tus palabras suaves, tu voz melancolica...susurrando pausadamente palabras huecas, vacías que hieren mi alma... y sin embargo mi corazón te extraña, tan doloramente que retumba en toda mi alcoba.
Te hecho de menos...aún ansio tu boca, nectar prohibido para mis labios ardientes, como mi cuerpo dolorido porque ya no te siente como antaño.
Mil veces, he intenado alejarte de mí, de mis recuerdos, de mis sueños y fantasias... mil veces he escupido tu nombre llorando de rabia por no tenerte, mil veces...en vano... mil veces!. Tantas, te he negado tantas veces que mi alma rendida me ha suplicado clemencia, exhauta por el esfuerzo titánico empleado por no amarte...

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